Por fin, el martín pescador

Cuando empecé en esto del vicio de la fotografía de naturaleza, uno de los mayores deseos era conseguir una imagen del martín pescador. Cuando veía esas bellas imágenes que otros fotógrafos mostraban de esta especie creía que nunca sería capaz de obtener una imagen como esas. Que alcanzar esa imagen estaba vedado para mí. Así las veía, bellas e inalcanzables como son los sueños, las más de las veces. Y ahora, después de algunos años y muchas horas de espera y madrugones a veces improductivos, por fin he conseguido esa  imagen soñada. Imágenes que no me canso de contemplar. Pero además de capturar estas imágenes, está el placer de ser testigo de ese milagro que a veces te depara la luz y la naturaleza cuando confluyen en un instante mágico que tienes la suerte de llevarte contigo en la tarjeta y en el corazón. Ese rayo verdeazulado que como un disparo recorre el río de posadero en posadero. Realmente me siento afortunado por disfrutar de algo tan bello que está ahí sin saber que vale tanto y que por desgracia podría desaparecer si no cuidamos nuestros ríos.